Con el objetivo de reducir las pérdidas de tiempo durante los partidos y fomentar un juego más dinámico, la Conmebol anunció la implementación del Protocolo de Múltiples Balones en todas sus competiciones. La medida comenzará a aplicarse en los próximos encuentros de la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana, y replica una iniciativa ya vigente en certámenes como la Premier League y la UEFA Champions League.

Este nuevo sistema contempla la distribución de 15 balones oficiales alrededor del campo de juego, ubicados en soportes individuales colocados frente a carteles publicitarios, bancas de suplentes y zonas cercanas a los arcos. Todos los balones deberán ser idénticos en marca, modelo y características, en este caso el PUMA Cumbre 2025, provisto por la propia entidad.

El protocolo también introduce cambios en la función de los alcanzapelotas. A partir de ahora, cada partido contará con 12 pasapelotas identificados con chalecos oficiales de Conmebol. Su tarea será recoger las pelotas que salgan del terreno de juego y reponerlas en los soportes designados. En ningún caso podrán entregar balones directamente ni interferir en el desarrollo del juego. Si incumplen sus funciones, el árbitro podrá advertirlos, reemplazarlos o retirarlos de su puesto.

Además, queda prohibido para los integrantes del cuerpo técnico y jugadores suplentes tocar o manipular los balones, incluyendo la acción de retirarlos de los soportes o arrojarlos al campo.

Antes del inicio de cada encuentro, el delegado de partido designado y un miembro del equipo arbitral serán los responsables de repasar el protocolo con los pasapelotas y definir las posiciones finales de los balones, teniendo en cuenta las características del estadio.

Esta iniciativa se suma a otros cambios reglamentarios ya adoptados por la Conmebol en 2025, como el límite de ocho segundos para los arqueros que retengan la pelota con la mano.