En la naturaleza se pueden encontrar diferentes plantas venenosas.
Una de ellas es la Cicuta Virosa
Cuenta la historia que los antiguos griegos extraían veneno de la cicuta virosa para consumirla y quitarse la vida. El famoso filósofo Sócrates, fue condenado en un juicio a beber una copa de cicuta en el año 399 a.C.
Esta hierba venenosa es nativa de Europa y Norte de Africa y es semejante al perejil, del cual apenas se distingue más que por el color oscuro y el olor desagradable de sus hojas.
Es típica de terrenos baldíos, escombreras y bordes de caminos. De ella se extrae un veneno que recibe el mismo nombre y que era usada por los antiguos griegos para quitarse la vida.
El veneno de la Raíz de amargura
En la actualidad hay situaciones que nos pueden envenenar, una de ellas es la amargura, o la raíz de amargura
La amargura es el resultado de un resentimiento. Se vive una ofensa, al no perdonar, la ofensa se convierte en Ira o en dolor, y esta se convierte en odio. Este odio se convirtió en amargura que es aflicción del alma. Nadie puede ser feliz o tener paz si su corazón está lleno de amargura.
La biblia dice “Mirad bien de que nadie deje de alcanzar el regalo de Dios, de que ninguna raíz de amargura, brotando, cause dificultades y por ella muchos sean contaminados; en hebreos 12:15
El no perdonar las ofensas, el quedarte con lo amargo en el corazón, puede traernos complicaciones en la vida, en la salud, en nuestro entorno, puede matar nuestros sueños y convertirnos en personas contaminadas.
No dejes que esa raíz te envenene sé libre y perdona, todo dolor del pasado, aunque resulte muy difícil es la manera correcta de vivir en libertad