Efectivos de la División de Defensa del Medio Ambiente de San Vicente, perteneciente a la Policía de Misiones, llevaron a cabo dos operativos de rescate de fauna silvestre: uno en la localidad de Aristóbulo del Valle y otro en Caraguatay. En ambos casos, se trató de animales en situación de cautiverio o desplazamiento fuera de su hábitat natural.

En primer lugar, los agentes intervinieron en la zona de Picada Goldad, municipio de Aristóbulo del Valle, donde rescataron a un mono caí (Sapajus nigritus) en malas condiciones de salud. La acción fue impulsada tras una denuncia presentada por el Centro de Rescate Ohana. Según indicaron desde la fuerza, una mujer de 33 años mantenía al animal en su domicilio desde hacía varios años, a pesar de que en 2020 ya se había labrado un acta de inspección por parte de personal de Ecología, instándola a regularizar la tenencia.

Al arribar al lugar, la mujer accedió a entregar al animal voluntariamente. El mono presentaba un estado general deteriorado, con signos de desnutrición, pérdida de piezas dentales y colmillos limados. Fue trasladado bajo estrictas medidas de bioseguridad al Centro de Rescate Ohana, donde será evaluado por profesionales veterinarios y se definirá su posible reinserción en la naturaleza.

En un procedimiento paralelo, la misma división rescató una serpiente cascabel en la localidad de Caraguatay. El animal se encontraba en buen estado, sin lesiones visibles, y fue reinsertado en su entorno natural tras su evaluación.

Ambas intervenciones se enmarcan en las tareas de control y protección de la fauna silvestre que realiza la Policía de Misiones, con el objetivo de desalentar el mascotismo ilegal y garantizar el bienestar de los animales nativos.