YPF anunció ayer que en los próximos tres meses aumentará 18% el precio de la nafta y el gasoil. De este incremento, un 15% será para recomponer márgenes de ganancia de la empresa, mientras que el 3% restante corresponde a la suba del impuesto a los combustibles.
El primer aumento se aplicará el próximo martes y se espera que sea de entre 6 y 7%. Luego se prevé que el resto de las marcas de estaciones de servicio acompañen el ajuste (Shell, Axion y Puma Energy).
“Somos conscientes del impacto que tiene esta medida para los argentinos y las argentinas, pero somos conscientes de que si el país no tiene la energía necesaria para desarrollarse, no estamos cumpliendo con nuestro rol. La energía que no se puede generar tiene que ser suplantada importando de otros países. No hay energía más barata que la que se produce de forma competitiva y eficiente”, explicó ayer Sergio Affronti, CEO de YPF, al presentar el plan de inversiones de este año, que será de US$2100 millones.
El presidente de YPF, Pablo González, comentó que el objetivo de la petrolera es que el 18% de incremento sea el último en el año, pero la decisión dependerá de lo que suceda con la inflación, la devaluación y el alza del valor del barril de petróleo.
La llegada de González a YPF, de buena sintonía con el Presidente y la vicepresidenta, fue importante para que el Gobierno le permitiera a la petrolera un incremento de dos dígitos en las naftas.
El presidente de YPF, Pablo González, y el CEO, Sergio Affronti, anunciaron ayer que la compañía aumentará los precios de los combustibles 18% en los próximos tres meses. De ese porcentaje, el 15% estará destinado a recuperar los márgenes de rentabilidad de la empresa luego del alza de costos por la suba del valor de barril de petróleo y la devaluación del peso, y el 3% restante es producto del aumento del impuesto a los combustibles, que se trasladará al surtidor a partir de abril.
El primer incremento se dará el próximo martes y podría ser de entre 6% y 7%. La empresa necesita mejorar rápidamente sus ingresos para incrementar la inversión en la producción de petróleo y gas. Luego, el resto de las marcas de estaciones de servicio acompañarán la medida (Shell, Axion y Puma Energy).
“Es necesario aplicar incrementos de los precios en los próximos tres meses en el orden del 15%, más el aumento que se puede producir por el alza del impuesto a los combustibles, de forma de generar el abastecimiento necesario de energía”, dijo Affronti en el salón de eventos que tiene la torre de YPF ubicada en Puerto Madero. Lo escuchaban por streaming los gobernadores de las provincias petroleras, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y el secretario de Energía, Darío Martínez.
“Somos conscientes del impacto que tiene esta medida para los argentinos y las argentinas, pero somos conscientes de que si el país no tiene la energía necesaria para desarrollarse, no estamos cumpliendo con nuestro rol. La energía que no se puede generar tiene que ser suplantada importando de otros países. No hay energía más barata que la que se produce de forma competitiva y eficiente”, explicó Affronti.
El CEO indicó que si bien los precios de los combustibles aumentaron 35% desde agosto pasado, solo un 14% se tradujo en una mejora de rentabilidad para las empresas; el resto de las subas fueron para trasladar el incremento del impuesto a los combustibles y para actualizar las tarifas de biocombustibles, un insumo que las refinadoras utilizan para cortar el petróleo.
Affronti, además, explicó que, desde noviembre pasado, el precio internacional del barril de crudo subió de US$40 a U$70, lo que implicó un brusco aumento de sus costos en el corto plazo. Sumado a esto, el ejecutivo se refirió al impacto de la devaluación de los últimos meses, en una industria cuyos costos están en dólares.
González luego agregó que la idea de la compañía es que este aumento neto de 15% sea el único en el año, aunque la decisión dependerá de cómo evolucione la macroeconomía; es decir, la inflación, la devaluación y la dinámica del precio internacional del petróleo.
La llegada a la presidencia de YPF de Pablo González, de buena sintonía con Alberto Fernández, la vicepresidenta Cristina Kirchner y los gobernadores, fue importante para que el Gobierno le permitiera a la petrolera un incremento de precios de las naftas de dos dígitos.
Por el lado de los impuestos a los combustibles, fuentes de la industria indicaron que el tributo se diferirá para el mes que viene y se dividirá en dos partes. El impuesto implica una suba en el surtidor de alrededor de
3%, que se distribuirá en un alza de 1,5% en abril y otro porcentaje igual en mayo. Por lo tanto, el incremento que harán la semana que viene las empresas servirá enteramente para mejorar sus ingresos.
Sobre el esquema de actualización de impuestos, González adelantó que habló la noche anterior con el presidente Alberto Fernández y con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y le indicaron que se modificará la forma de cálculo del incremento del tributo, para que no genere tanta presión en los precios de los combustibles. La idea es fijar un mecanismo de ajuste que se corresponda con el valor de las naftas, y que no esté basado en la inflación del trimestre anterior, como es actualmente.
El exvicegobernador de Santa Cruz, que asumió hace menos de un mes como flamante presidente de YPF, se refirió también al proyecto de ley de régimen de promoción de hidrocarburos, que Fernández prometió en la inauguración de las asambleas ordinarias. “Se nos ha consultado sobre este proyecto y hay técnicos de YPF que han colaborado en la estructura de la norma, que es fundamental para promover inversiones y desarrollar la industria”, indicó.
El proyecto de ley entraría en el Congreso dentro de 10 días y se espera que incluya facilidades para acceder al mercado de cambios y reducción de Ingresos Brutos para el sector.
Fuente: La Nación