Esta semana, el Concejo Deliberante de Eldorado está llevando a cabo una serie de reuniones para analizar y reformar el Código de Nocturnidad de la ciudad. En el último encuentro, Germán Chemes, director de Asuntos Jurídicos de la Municipalidad, expuso la necesidad de que la reforma sea práctica y aplicable.
«Que la norma no se convierta en letra muerta, porque podemos tener las mejores intenciones, pero si después no podemos llevarla a la práctica, la ordenanza se va a convertir en leña muerta. Tenemos muchas ordenanzas que son bárbaras desde la técnica legislativa, pero impracticables, entonces es como si no existiesen» precisó Chemes en una entrevista a Eldópolis Radio 106.3
El director también señaló las limitaciones operativas tanto de la policía como del municipio, afirmando que es esencial «sincerar la norma, atacando realmente los puntos que sí podemos cumplir con la ordenanza para hacerla al cien por ciento operativa»
Durante las reuniones, surgieron preocupaciones de empresarios de boliches bailables y organizadores de eventos que se oponen a las fiestas al aire libre, argumentando que estas afectan sus negocios. En respuesta, Chemes explicó: «No podemos ir en contra de la corriente. Hoy los jóvenes de todo el país y de muchos lugares del mundo prefieren que las fiestas sean al aire libre. Lo que vamos a tratar de hacer es reglamentar de la mejor manera posible para que todos puedan, en definitiva, organizar fiestas al aire libre cuando quieran.»
En cuanto a la problemática de los menores y el consumo de alcohol, Chemes fue contundente: «Estamos todos de acuerdo en que los menores de dieciocho años no pueden ingerir bebidas alcohólicas. Ahora, lo que no está tan claro es la permanencia o no de menores en lugares donde se expendan bebidas alcohólicas.» También mencionó que se está discutiendo la regulación de las conservadoras en estos eventos, buscando evitar el uso de envases de vidrio por razones de seguridad.
Finalmente, Chemes enfatizó la necesidad de que la normativa sea útil y aplicable, y señaló que la regulación adecuada de fiestas al aire libre y eventuales podría reducir significativamente las fiestas clandestinas. «Las fiestas clandestinas son clandestinas, por eso no las podemos reglamentar. Pero sí podemos reglamentar fiestas al aire libre y eventuales, lo que irá en detrimento de las fiestas clandestinas. Cuando tengamos una normativa clara y aplicable, emanada desde el consenso, las fiestas clandestinas van a terminar,» concluyó.