Jue, 21 de noviembre de 2024
Motivación

Camino a Belén

Cuando leo el relato del nacimiento de Jesús en el libro de Lucas. Me imagino una comedia musical al mejor estilo de Broadway pero en este caso dirigida por Dios mismo.

Hay solista, coros. Y muchas canciones.

Canta María. Cantan los Ángeles. Cantan los Pastores. Canta Simeón. Canta Ana.

Y pensar que hay muchos que dicen que no hay que celebrar la navidad. Sin embargo, Dios envía a sus ángeles para que todos sepan lo que había ocurrido en Belén.

Envía a su Ejército para que cante sobre la paz que llegaba al mundo. El coro de Ángeles, canta delante de los pastores, le cuentan que el Salvador había nacido. Y ellos no se quedan a discutir que significaba lo que acababan de ver. Sino que corren a encontrarse con ese Dios que se encarnaba para llegar a este mundo.

Y ocurrió en el momento justo:

Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley. Gálatas 4:4

Fue un acto voluntario:

 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Filipenses 2:6-8

Vino a cumplir una misión:

  • Dar a conocer al Padre

Y les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos. Juan 17:26

  • Se transforma en nuestro Sumo Sacerdote. Conociendo nuestras debilidades

Por lo tanto, ya que, en Jesús, el Hijo de Dios, tenemos un gran sumo sacerdote que ha atravesado los cielos, aferrémonos a la fe que profesamos. Porque no tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que ha sido tentado en todo de la misma manera que nosotros, aunque sin pecado. Así que acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que más la necesitemos. Hebreos 4:14-16.

  • Él es el Cordero de Dios que es muerto por tus pecados y por los míos.

El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Juan 1:29.

El que hace más de 2000 años nació como un bebe en un pesebre, que habitó en un cuerpo mortal, siendo el Verbo creador del universo entero, fue llevado a la muerte en la cruz, para que vos y yo podamos alcanzar el perdón, fue exaltado por Dios mismo a un lugar de honor, sobre todo nombre.

Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre. Filipenses 2:9

Y dentro de poco volverá, para encontrarse con su pueblo, los que claman ven Señor Jesús, y lo hará como el Rey de Reyes y el Señor de Señores.

 Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles. Apocalipsis 17:14.