Carlos Scapini, capitán del Club Deportivo Vicov, ofreció una narración detallada sobre los eventos ocurridos durante y después del partido disputado en Posadas el pasado domingo. En una entrevista con Eldópolis Radio 106.3, Scapini explicó cómo la situación escaló desde una disputa sobre una decisión arbitral hasta su detención junto con otros miembros del equipo.
Según Scapini, la controversia comenzó cuando el árbitro principal del encuentro decidió expulsar a uno de sus compañeros de equipo. «Yo me acerqué al árbitro para pedirle explicaciones, ya que el asistente había señalado que no había sido falta grave», explicó detalladamente Scapini durante la entrevista. «Pero en lugar de recibir una respuesta clara, los policías entraron al campo con escudos y comenzaron a reprimir a los jugadores y al cuerpo técnico», agregó.
El jugador destacó que la intervención policial fue desproporcionada y afectó no solo a él sino a todo el equipo. «No era solo una cuestión mía, sino que todos estábamos tratando de entender lo que había sucedido. Algunos de los chicos más jóvenes del equipo estaban realmente asustados», expresó Scapini, subrayando la gravedad del incidente.
Scapini también mencionó la preocupación por la seguridad de su hijo, quien estaba presente en la tribuna durante el incidente y tuvo que ser rescatado por su madre. «Es lamentable que situaciones como estas afecten la experiencia de juego y la seguridad de todos los involucrados», afirmó con vehemencia.
En cuanto a las acciones legales posteriores a su detención, Scapini indicó que está evaluando junto a su abogada las medidas a tomar. «Mi familia y mi reputación como jugador se vieron injustamente afectadas por lo ocurrido», declaró de manera contundente.