Çon actividades en hospitales, hogares de ancianos, la cárcel y las calles, Corrientes vive la previa de la Fiesta Nacional del Chamamé, cuya edición 33 comenzará el próximo viernes en el anfiteatro Mario del Tránsito Cocomarola, como “gran vidriera chamamecera a nivel mundial”, señaló en Télam Radio el presidente del Instituto de Cultura provincial, Gabriel Romero.
“Siempre decimos y tomando lo que decía Julián Zini (sacerdote, poema, autor y compositor correntino) casi que el chamamé es como una religión y que la catedral de esta religión, el espacio más importante de la religión, es el anfiteatro Mario del Tránsito Cocomarola”, expresó Romero.
El titular del Instituto, que tiene la máxima responsabilidad organizativa, destacó el “clima” que se vive en Corrientes por estos días por la “previa” de la Fiesta que vienen realizando en los últimos años “con la idea de que la gente pueda disfrutar en el lugar que esté con serenatas, la costanera, las plazas”.
“Es muy interesante ver de qué manera la gente adhiere a esta fiesta que, más allá de ser la gran vidriera del chamamé a nivel mundial, como decimos nosotros, es la posibilidad de generar un recurso turístico que posibilita que Corrientes tenga hotelería llena y que genere y que active económicamente a la ciudad y a parte de la provincia”, subrayó.
Sobre la organización, valoró en especial la contratación de “más de 220 artistas de Corrientes, de Brasil, de Paraguay, de Buenos Aires y también de algunos artistas que son extra chamamé, como el caso de Axel, de Jorge Rojas, de Soledad”.
“Y por otro lado, hay que mencionar que toda la técnica, la producción, la generación de trabajo en torno a la fiesta es muy importante. Y en estos tiempos difíciles, por supuesto que vale la pena fortalecer la idea de sostener esta fiesta, como lo venimos haciendo hace muchos años”, apuntó.
Romero ponderó “la difusión del género chamamecero, sus diferentes expresiones no solamente en cuanto a la música, sino también la danza”.
“Y también hacemos la difusión de la artesanía, de la gastronomía. Así que, bueno, es una gran posibilidad para mostrar diferentes aspectos de la provincia”, agregó.
En cuanto a la continuidad de la tradición chamamecera, dijo que “hay una gran cantidad de jóvenes y niños que ejecutan algún instrumento o que bailan chamamé o que cantan chamamé. La verdad es que es impresionante la cantidad de jóvenes en todo el territorio de la provincia”.
“También hay una cantidad de jóvenes que se acercan a la Fiesta Nacional del Chamamé como un lugar de encuentro. Más allá de lo que suceda en el escenario. Esto venimos observando en los últimos años”, contó.
Al respecto valoró que “la Fiesta se convirtió en un lugar de encuentro y está muy bueno que el chamamé sea ese tema que aglutine a toda una comunidad”.
“Y en todos estos espacios que mencionaba más una cantidad de propuestas privadas, de peñas, de bares que van a tener chamamé, se convierten en un espacio de encuentro muy, muy, muy fuerte”, relató.
Romero también puso de relieve las actividades en la misma línea que se despliegan en municipios cercanos a Corrientes capital, tales los casos de “Empedrado, que está a 50 kilómetros, Riachuelo y El Sombrero”.
“Tenemos a Itatí, Paso de la Patria a San Cosme, a Santa Ana, a San Luis del Palmar, que también generan actividades muy importantes durante todos estos días”, añadió.
Por Alejandro Delgado Morales