Un avión privado buscaba aterrizar en el aeropuerto de San Fernando, provincia de Buenos Aires, cuando se despistó e incendió tras impactar contra una zona de viviendas. Dentro del avión había seis personas y ya se confirmó la muerte de al menos dos personas e informaron que hubo heridos en el accidente.
El avión privado, un Challenger 300 con matrícula LV-GOK, pertenece a la familia de Jorge Brito, dueño del Banco Macro y presidente del Club Atlético River Plate, pero en esta ocasión estaba alquilado. El mismo volvía de realizar un viaje desde Punta del Este, Uruguay, hacia la Argentina y, al momento del accidente se confirmó la presencia de dos tripulantes que fallecieron.
Según trascendió, el avión logró ingresar a pista, pero por algún motivo, aún desconocido, no frenó y terminó impactando contra viviendas vecinas al aeropuerto de San Fernando y se incendió. En principio, lo que se sabe es que el avión entró largo a la pista y toco suelo en la mitad, a partir de lo que se cree que el piloto buscó frenar en lugar de realizar un go around, maniobra utilizada en los aterrizajes imperfectos.
Ante el hecho, se acercaron bomberos voluntarios municipales y las dotaciones de Bomberos de la Ciudad del Cuartel V (Belgrano), GER Saavedra, Destacamento Devoto y dos unidades del Cuartel Central de la Policía Federal.
Al colisionar la aeronave contra las viviendas cercanas, impactó principalmente contra una que, afortunadamente, se encontraba deshabitada. La totalidad de la cuadra fue evacuada y las llamas se encuentran dominadas, aunque aún no extintas.
El vuelo había partido rumbo a Punta del Este, desde el mismo aeropuerto, a las 11.12 y aterrizó al otro lado del Río de la Plata a las 11.44. Una hora después, partió desde Uruguay nuevamente hacia San Fernando, donde ocurrió el fatal accidente a las 13.18.