A través de ciberpatrullaje en la localidad de Oberá, los agentes arrestaron a un hombre de 51 años que intentaba vender un arma de fuego presuntamente robada. Además, en su vivienda tenía un arsenal que está siendo investigado por los peritos para determinar su procedencia.
Los investigadores de la Unidad Regional II de Oberá llevaban a cabo patrullajes virtuales cuando detectaron que un hombre intentaba comercializar un arma calibre 9 mm presuntamente robada. Ante esto, pactaron un encuentro en la intersección de la Nacional 14 y Ruta 5, supuestamente para la compra del arma de fuego.
Fue así que, una vez allí, solicitaron al vendedor que exhibiera el elemento y constataron que se trataba de un arma denunciada como robada en esa localidad en el año 2004. Por este motivo, le secuestraron el arma y detuvieron al hombre de 51 años. Además, el hijo menor que estaba junto a él fue llevado a su domicilio y entregado a su progenitora.
Cabe mencionar que en la vivienda, la mujer hizo entrega a los agentes de cinco escopetas de diversos calibres, un arma de aire comprimido y un revólver calibre 22, pertenecientes supuestamente al detenido.
Finalmente, el detenido fue trasladado a la dependencia policial, donde quedó alojado a disposición de la justicia, y las armas secuestradas fueron depositadas donde serán examinadas por los profesionales para determinar su procedencia.