La Policía detuvo en Campo Grande a un agente de la fuerza provincial y a otro hombre, implicados en el robo millonario a una distribuidora de Oberá. Durante el allanamiento secuestraron más de 3 millones de pesos, teléfonos celulares y otros elementos relevantes para la causa.
El operativo comenzó alrededor de las 21:00 del miércoles, tras una investigación que siguió al robo ocurrido en la distribuidora ubicada en la avenida Beltrame de Oberá. Los delincuentes habían ingresado al local y sustraído una importante suma de dinero de una caja fuerte, para luego escapar en una camioneta de la empresa, que fue recuperada poco después.
Las cámaras de seguridad mostraron que tras abandonar la camioneta, los asaltantes se trasladaron en un Ford Focus. La identificación del propietario del vehículo, un ex empleado del local, permitió localizar la vivienda donde presuntamente se escondió el botín. Con la orden judicial correspondiente, los agentes ingresaron al domicilio en la calle Alvear de Campo Grande, donde arrestaron al agente de policía y encontraron $3.200.000 escondidos en una chimenea, una máquina de contar dinero, tres teléfonos celulares, dos pistolas de aire comprimido y un monitor con la inscripción de la distribuidora.
Durante la jornada, los investigadores localizaron el Ford Focus en un taller cercano a la calle Colectora Tristán y César Ayrault de Campo Grande. Allí, un hombre de 25 años explicó que había llevado el vehículo para reparaciones y que el propietario, el segundo implicado, se encontraba en su domicilio. Los efectivos se dirigieron a la vivienda, donde el segundo sospechoso, al notar la presencia policial, intentó escapar pero fue detenido. Se le incautaron $142.000, mientras que al encargado del taller se le decomisaron otros $97.000 que habría recibido del detenido.
El agente provincial fue separado de la institución por disposición de la Jefatura de Policía y se encuentra a disposición de la Justicia. Los elementos secuestrados permanecen como prueba en la causa. Los investigadores continúan buscando a un tercer involucrado, cuya identidad ya ha sido establecida, y trabajan en la recuperación del resto del dinero sustraído.
