Vie, 18 de octubre de 2024
Efemerides

Día Mundial de la Selfie: cada día se hacen más de 92 millones en el mundo

Más de dos décadas después del surgimiento de ese nombre –“selfie”–, este tipo de imagen se ha convertido en uno de los rasgos más definitorios del siglo 21. Los selfies no pierden vigencia: están en todas partes, en cualquier lugar del mundo, a cualquier hora.

Queramos o no, odiemos a las selfies o no, todos hemos sido partícipes de este fenómeno.

Por “selfie” se entiende cualquier fotografía de uno mismo tomada por uno mismo, por lo general con cámaras digitales –webcam, cámaras profesionales y, sobre todo, las cámaras de los smartphones– y con la intención, sobre todo, de ser compartidas en las redes sociales.

Se trata, entonces, de un tipo de autorretrato con unas particularidades específicas. En eso se diferencia de los autorretratos que se popularizaron en el siglo 20 con la masificación de las cámaras fotográficas y, luego, con la llegada de las cámaras Polaroid instantáneas, como el que se hicieron «Thelma & Louise” antes de emprender un desastroso viaje por carretera en la inolvidable película de Ridley Scott de 1991.

A finales de octubre o principios de noviembre de 1839, un hombre de 30 años estaba solo en el patio del negocio familiar de alumbrado por gas en Filadelfia. Ante él, había una cámara improvisada con un objetivo hecho con unos binoculares de ópera.

Tras determinar que la luz del día era suficiente para exponer la placa metálica cuidadosamente preparada en el interior de la cámara, el hombre, Robert Cornelius (1809-1893), se dispuso a fotografiarse a sí mismo. Para lograrlo, tenía que permanecer inmóvil y mirar al frente durante 10 o 15 minutos.

Se cree que este daguerrotipo realizado por Robert Cornelius en 1839 es el primer autorretrato fotográfico, y por extensión, la primera selfie, de la historia (Imagen: Wikimedia Commons)

En el daguerrotipo resultante –como se le denomina a la primera técnica fotográfica usada para captar imágenes mediante una cámara y un procedimiento químico– aparece Cornelius con el cuello de la camisa levantado, el pelo alborotado y cierto gesto de melancolía en el rostro

Esta imagen es considerada el primer autorretrato –en consecuencia, la primera selfie– de la historia y desde 1996 pertenece a la colección de la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos, la entidad cultural más antigua del país.

Ciento sesenta y tres años después, el 13 de septiembre de 2002, el australiano Nathan Hope publicó en un foro de internet una foto de su boca lastimada con el siguiente texto: «Borracho en el cumpleaños 21 de un amigo, me tropecé y caí de bruces (con los dientes delanteros muy cerca) en unos escalones. Me hice un agujero de un centímetro de largo en el labio inferior. Y perdón por el enfoque, era una selfie«.

Casi de inmediato, los medios australianos convirtieron a Nathan en una suerte de pequeña celebridad al endosarle el hito de haber acuñado el término “selfie”. Decenas de artículos se escribieron sobre la “hazaña” de este joven y, no mucho después, ya se hablaba de él en los medios internacionales.

Nathan negó ser el creador de ningún nuevo término, atribuyéndole esta construcción verbal al argot propio de los australianos y más, en su caso, a una borrachera. En su habla común, los australianos tienden a abreviar las palabras añadiéndoles el sufijo “ie”. Entonces, palabras como “barbeque” (parrilla o barbacoa) o “postman” (cartero) se convierten en “barbie” y “postie”, respectivamente.

En el caso de “selfie”, vendría a ser una combinación de “self” (yo, propio, ser) con el sufijo “ie”. Obviamente, esa palabra ya existía en la oralidad australiana cuando Nathan la escribió en su post, y fue mucho tiempo después que empezó a generalizarse en el habla común con el significado que tiene hoy en día.

De hecho, las selfies se hicieron populares a partir de 2010, cuando Apple lanzó el iPhone 4, el primer smartphone equipado con una cámara para este propósito.

Tres años después, en noviembre 2013, el Diccionario de Oxford incluyó “selfie” en su edición en línea y, de paso, la escogió como palabra del año.

Al año siguiente, Twitter declaró al año 2014 como “el año de la selfie”, luego de que la palabra fuera mencionada en esta red social más de 92 millones de veces, esto es, 12 veces más que el año anterior, según un reporte de la BBC.

En 2022, se declaró el 21 de junio como el Día Nacional de la Selfie en Estados Unidos.

Los números que hoy acompañan a las selfies son impresionantes. Según Photutorial, un sitio web dedicado a ofrecer datos e información sobre temas y recursos creativos, cada día se toman 92 millones de selfies en el mundo, lo cual representa un 4% del total de fotos que se hacen a diario: 2.300 millones.

ntre las curiosas estadísticas de Photutorial sobre las selfies están:

  • Más del 50% de los millennials ha publicado, al menos, una selfie en su vida.
  • Más del 95% de los adultos jóvenes se han hecho una selfie.
  • Las personas gastan 54 horas al año (siete minutos al día) haciéndose selfies.
  • El 60% de las personas sonríen en sus selfies.
  • Las mujeres se hacen 1,5 más selfies que los hombres.
  • El 41% de las personas dice que odia cómo sale en las fotos.
  • El 22% edita sus selfies antes de publicarlas.

Según CNN Travel, la Torre Eiffel (París) es el lugar más popular del mundo para hacerse una selfie, seguido de Disney World (Orlando, Florida), el rascacielos Burj Khalifa (Dubái), el Big Ben (Londres) y el Empire State Building (Nueva York).

De las miles de millones de selfies que se han hecho en este mundo, quizás la más famosa sea la que Ellen Degeneres se hizo en 2014 mientras presentaba los Oscar en 2014 y en la que aparecía con un grupo de estrellas de Hollywood como Bradley Cooper (que tomó la selfie con su smartphone), Jennifer Lawrence, Meryl Streep, Brad Pitt, Angelina Jolie, Julia Roberts, Lupita Nyong’o, Channing Tatum y Kevin Spacey

Se considera que la sefile de la presentadora del Oscar, Ellen DeGeneres, tomada por el actor Bradley Cooper y con la presencia de varias estrellas de Hollywood en el Dolby Theatre de Los Ángeles el 2 de marzo de 2014, es el más popular de todos los tiempos. (Foto. Getty Images)

Degeneres posteó la foto en Twitter (hoy X) y batió récords por ser la selfie más compartida en su momento en la red social: unos tres millones de retweets en cosa de minutos.

De aquellos tiempos a estos, la selfie se ha convertido en un hábito ineludible, casi obligatorio, entre celebridades, políticos, deportistas, criminales, terroristas y, desde luego, la gente común. De hecho, existe también la palabra “selfitis” para designar al “deseo obsesivo-compulsivo de hacerse fotos a uno mismo y colgarlas en las redes sociales”.

Más allá de los políticos y las celebridades, en 2011 se registró la primera selfie tomada por un animal. Ocurrió en Indonesia, cuando Naruto tomó la cámara del fotógrafo de la naturaleza David John Slater y se hizo varias fotos a sí mismo.

Selfie de Naruto, una hembra de macaca nigra en el norte de Sulawesi, Indonesia, que disparó varias la cámara del fotógrafo David Slater y fue objeto de un litigio en la corte. (Imagen: Wikimedia Commons).

Esas fotos le dieron la vuelta al mundo y originaron un litigio entre la organización defensora de los derechos de los animales PETA y Slater, que publicó las fotos de Naruto en su libro. PETA demandó al fotógrafo argumentando que la publicación y venta de esas fotografías infringía los derechos de autor de Naruto en virtud de la Ley de Propiedad Intelectual.

Al final, un tribunal falló en favor del fotógrafo humano, no de la fotógrafa simia.