Después de algunas demoras y explosiones que arrojaron dudas sobre el acuerdo, comenzó este viernes el alto el fuego entre Israel y Hamás. La tregua se extenderá por cuatro días y se espera que en ese lapso, los combatientes del grupo paramilitar dejen ir un total de 50 rehenes. A cambio, está previsto que sean liberados 150 prisioneros palestinos que se encuentran detenidos en cárceles israelíes.
Medios internacionales añadieron que Israel extendería la tregua un día más por cada diez rehenes que sean liberados. Para este viernes, se espera la liberación de 13 mujeres y niños retenidos en Gaza.
El alto el fuego se firmó después de intensas negociaciones con Qatar, Egipto y Estados Unidos como mediadores.
La corresponsal de la BBC en el sur de Israel, Anna Foster, aseguró que el Ejército israelí continuó con las acciones militares hasta que comenzó el alto el fuego y, al parecer, hasta poco después de iniciado.
Datos oficiales de Israel indican que en el ataque del pasado 7 de octubre, los miembros de Hamás secuestraron a unas 240 personas, en una irrupción que además dejó unos 1.200 muertos.
La contraofensiva israelí ha dejado 14.000 víctimas fatales en territorio palestino, según el Ministerio de Salud de Gaza.
El acuerdo también contempla el ingreso a Gaza a través de Egipto de más de 200 camiones que transportan insumos médicos, agua y alimentos, combustible y gas para cocinar.
Autoridades de El Cairo indicaron que se permitirá el paso de 130.000 litros de diésel al día en Gaza.