Enfrentado con los legisladores, a quienes dijo no necesitar para «salvar la economía», el presidente Javier Milei inaugurará esta noche el período de sesiones ordinarias del Congreso.
Milei romperá con la tradición de abrir las sesiones al mediodía y pronunciará su discurso a las 21, en el prime time de la TV. «Es para que la mayor cantidad de argentinos puedan escuchar el mensaje presidencial después de sus horarios de trabajo», explicó el vocero presidencial Manuel Adorni. Pero las modificaciones que introdujo La Libertad Avanza no se agotan en un cambio de horario: el mandatario hablará desde un atril ubicado debajo del estrado donde se sentarán las autoridades de ambas cámaras, Victoria Villarruel, por el Senado, y Martín Menem, por Diputados.
El acto, que comenzará formalmente a las 20, tendrá como telón de fondo la tensión entre el presidente y algunos gobernadores, que acusan a la administración central de querer ahogarlos financieramente.
En su mensaje, que podría extenderse por una hora, se espera que Milei haga un balance de la herencia recibida a partir de informes de la SIGEN y de la Secretaría de Transformación del Estado «con la situación de cada una de las reparticiones del Estado».
En ese marco, no se descarta que el mandatario ponga el acento además en los viajes realizados en aviones o cruceros por unas 120.000 personas que tenían planes sociales, los desvíos de fondos en organismos como la Anses y el PAMI y los hechos de corrupción descubiertos en el ex ministerio de Desarrollo Social como alimentos secos vencidos sin repartir, y compras de medicamentos oncológicos, prótesis y audífonos sin licitación previa. Además, habría una «sorpresa» que se mantiene en secreto.
En una entrevista publicada ayer por el Financial Times, Milei admitió que será «difícil» aprobar las reformas que pretende con la actual composición del Congreso. «Los políticos no tienen problema de dañar los intereses de los argentinos para mantener sus privilegios», disparó. Sin embargo, dijo no necesitar al Congreso para «salvar la economía» porque hasta las elecciones de medio término, «hay otras reformas» que puede aplicar por Decreto.
Las expectativas de los legisladores están centradas en el tono que tendrá el discurso que formulará el presidente ante el Congreso, por sus referencias públicas hacia la política y en especial a los integrantes del Palacio Legislativo, al que calificó recientemente como «un nido de ratas». Aún resuena también en varios legisladores la decisión del presidente de darles la espalda el día de la asunción.
Por eso, una posibilidad que habían planteado era darle ellos la espalda al mandatario cuando haga su ingreso al recinto. Esta postura habría perdido fuerza en las últimas horas.
En la rueda de prensa de ayer, Adorni apeló al «respeto y que se lo escuche atentamente y no ocurra ni dentro ni fuera (algo) que vaya en contra de instituciones y en contra de la salud de la democracia», al descartar que el discurso vaya a tener «carácter violento».
Adorni advirtió además en su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada que «determinados grupos de personas están siendo extorsionados» para manifestarse frente al Congreso Nacional en rechazo al discurso que pronunciará el Presidente y recordó que «la línea telefónica 134 está habilitada, es anónima y gratuita» para denunciar presuntas intimidaciones.
De esta manera, hizo alusión a las manifestaciones convocadas por la Unidad Piquetera y organizaciones de izquierda, que anunciaron que se movilizarán mañana por la noche frente al Congreso.
Paralelamente, militantes de La Libertad Avanza también anunciaron -por redes sociales- que se van a concentrar en las afueras del Congreso para dar su apoyo al Presidente.