Un día después de la multitudinaria marcha de este martes en reclamo de un mayor presupuesto para la educación pública, la Cámara de Diputados debatirá este miércoles desde las 11 el financiamiento de las universidades, la restitución del Fondo de Incentivo Docente (FONID) y la movilidad jubilatoria.
La sesión especial fue pedida por el bloque de Unión por la Patria, que confía en que la movilización de ayer actúe como un factor de presión que fuerce a los legisladores opositores que participaron de la protesta a bajar al recinto para dar quórum.
«Contundente y masiva manifestación popular en defensa de la Universidad Pública en todo el país. El próximo paso es que los diputados y diputadas que se pronunciaron a favor den quórum mañana en la sesión especial de Diputados para garantizar el financiamiento universitario«, expresó Germán Martínez, jefe de bloque de UxP.
Descartado el respaldo de La Libertad Avanza y el PRO, cuyos legisladores no participaron de la movilización -algunos de ellos hasta la cuestionaron-, el principal bloque opositor aspira a conseguir entre los diputados de Hacemos Coalición Federal, la Unión Cívica Radical (UCR) y la izquierda las 30 bancas que le faltan para alcanzar el mágico número de 129 que le permita iniciar la sesión.
📄 • El bloque de UP solicita #SesiónEspecial para el próximo miércoles 24 de abril, a las 11.
El financiamiento de las Universidades, el Fondo de Incentivo Docente y las Jubilaciones no pueden esperar.
Tratamiento URGENTE en el recinto.
📎 Se adjunta pedido. pic.twitter.com/23kyCfpclK
— Diputados UP (@Diputados_UxP) April 19, 2024
El temario incluye siete proyectos para garantizar el presupuesto de las universidades públicas; otros siete para restituir la vigencia del FONID, que Milei dejó de girar a las provincias a principios de este año; y otros 13 relacionados con la movilidad jubilatoria, que el Gobierno modificó por Decreto.
La estrategia de la oposición más férrea es forzar al oficialismo a fijar fecha para tratar estas iniciativas en comisión. Es que como no tienen despacho, se necesitaría la aprobación de dos tercios de la Cámara, algo improbable.
La Casa Rosada, por su parte, insiste con auditar los gastos de las casas de estudio: «Es razonable que sepamos en qué se gasta el dinero. No debe molestar a nadie ni debe ser una preocupación que existan auditorías en los presupuestos públicos«.