La Cámara de Diputados dará inicio este lunes al mediodía al debate sobre la nueva ley de Bases y Puntos de Partida, tras intensas negociaciones entre el oficialismo y los bloques dialoguistas durante más de un mes. Este proyecto, que incluirá el apartado fiscal, se presenta a menos de un mes de la convocatoria al Pacto del 25 de Mayo, liderado por el presidente Javier Milei.
El consenso mayoritario alcanzado por el oficialismo recién la semana pasada, tras extensas rondas de negociaciones, permitió la realización del plenario de comisiones en el que se logró plasmar un dictamen de mayoría. El proyecto quedó listo para ser tratado en sesión durante el transcurso de esta semana, extendiéndose posiblemente hasta el miércoles en la madrugada.
Aunque el oficialismo intentó incluir varios ejes reformistas, la versión final del proyecto no terminó de conformar a todos los bloques, excepto a La Libertad Avanza y al PRO. No obstante, se estima que la votación en general estará garantizada con un piso de 135 votos a favor, con un techo difícil de alcanzar de 150 votos, según fuentes parlamentarias del oficialismo.
En el pelotón de apoyos se encuentran diversos bloques, incluyendo a La Libertad Avanza, Buenos Aires Libre, el MID, Independencia, el PRO, Hacemos Coalición Federal, los radicales, Innovación Federal y Creo. Sin embargo, la votación en particular podría presentar dificultades, ya que hay artículos que generan controversia y podrían ser modificados en el recinto. El proyecto, con 240 artículos y 162 páginas, será objeto de un exhaustivo debate durante al menos dos jornadas.
Uno de los focos de conflicto es la reforma laboral, que fue objeto de intensas negociaciones y se plasmó en una versión comprimida en el dictamen de mayoría. La UCR y la Coalición Cívica buscarán introducir cambios en el recinto, especialmente en lo que respecta a la derogación de multas por no registración, el período de prueba y el fondo de cese laboral.
Además, existe incertidumbre sobre la reversión de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias y el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), aspectos que podrían generar divisiones en el espectro político.
En medio de este complejo escenario, los diputados dialoguistas se enfrentan a una encrucijada dilemática, buscando equilibrar el apoyo al gobierno con la defensa de sus intereses y principios, mientras que el oficialismo deberá maniobrar con astucia para asegurar el éxito del proyecto hasta el último momento.