Vie, 18 de octubre de 2024
Internacionales

El dramático testimonio de rehenes israelíes liberados por Hamas: jaulas, poca comida y videos de asesinatos

Algunas imágenes muestran a milicianos de Hamas, encapuchados y con armas largas, mientras saludan amablemente a los rehenes que se suben a las camionetas de la Cruz Roja para ser trasladados a Israel. Los cautivos responden el saludo y mueven sus manos.

Pero esta despedida que parece emular la de cualquier adiós entre amigos esconde una realidad muy diferente. Varias mujeres y niños israelíes liberados desde el viernes contaron a la prensa el calvario y la violencia psicológica que sufrieron durante los casi dos meses que estuvieron secuestrados en algún lugar de Gaza.

La lista estremece: jaulas como lugar de cautiverio, niños obligados a observar las imágenes de la masacre perpetrada por Hamas el 7 de octubre y raciones de comida cada vez más escasas, con solo un puñado de arroz y pan de pita.

Los estremecedores testimonios de mujeres y niños israelíes liberados por Hamas

Varias mujeres israelíes liberadas en los últimos días, citadas por el Jerusalem Post, contaron que fueron mantenidas en jaulas durante su cautiverio. Se lo dijeron a miembros del Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas.

Mientras esta dura realidad se mantenía para varias cautivas, Hamas distribuía por su canal de Telegram una carta supuestamente escrita por Danielle Aloni, una de las rehenes liberadas. La misiva, escrita en árabe y hebreo, agradecía al grupo armado por la “extraordinaria humanidad” brindada a su hija, Emily, de cinco años, quien “se sentía como una reina” durante su cautiverio.

La carta también decía: “Siempre seré prisionera del amor porque (Emilia) no salió de aquí con un trauma psicológico para siempre”. Esta carta es similar a muchas otras que los rehenes fueron obligados a escribir, según medios israelíes.

Las rehenes israelíes liberados dijeron que pasaron hambre

Además, las rehenes liberadas dijeron que durante su secuestro les dieron muy poca comida.

Según afirmaron, solo se alimentaban con pequeñas raciones de arroz y pan de pita. En algunas ocasiones, se les dejó cocinar para los niños, En las últimas semanas, según Jerusalem Post, las raciones comenzaron a agotarse.

Merav Mor Munder, prima de Keren Munder que fue liberada el viernes, contó que “había días en que no había suministros, por lo que solo comían pan de pita. No fueron torturados, pero hubo días en que apenas tenían comida. En los últimos días, solo comieron muy poco arroz”, comentó.

Algunas rehenes manifestaron que se sintieron inseguras en los últimos momentos. Según dijeron, varias personas arrojaban piedras a los vehículos de la Cruz Roja que las trasladaban a Egipto. “Pensábamos que nos lincharían en el camino a Israel”, contó una mujer.

Los niños fueron obligados a ver imágenes de ejecuciones

En tanto, The Times of Israel reveló que los milicianos de Hamas obligaron a los niños mantenidos en cautiverio a ver videos del brutal ataque del 7 de octubre en el sur de Israel. Lo contó la tía de Eitan Yahalomi, de 12 años, a la televisión francesa tras su liberación el lunes por la noche.

En declaraciones a BFM, Deborah Cohen describió las condiciones que soportó su sobrino durante sus 52 días en cautiverio de Hamas. “Cuando llegó a Gaza, todos los residentes, todos, lo golpearon. Es un niño de 12 años. Cada vez que uno de los niños allí lloraba, lo amenazaban con rifles para que se callaran”, indicó.

La mujer dijo: » Pensaba que lo tratarían bien, pero resulta que no. Son monstruos. Su padre todavía está allí y hay 160 personas que aún no han regresado”. Además, contó que “Hamas lo obligó (a su sobrino) a ver videos” del ataque cuando milicianos palestinos mataron a unos 1400 israelíes.

Esther Yahalomi, la abuela del niño, dijo que sus primeros 16 días como rehén fueron los más duros porque lo dejaron completamente solo. “Hace un mes lo trasladaron con un grupo de personas de Nir Oz, y allí fue mucho más fácil para él”, dijo. Según comentó, su nieto está delgado y no sonríe ni habla. “Está muy, muy apagado. Creo que le llevará algo de tiempo. Se necesitará mucho trabajo para llevarlo a un lugar donde pueda hablar”, afirmó.