El programa de abordaje integral de enfermedades cerebrovasculares estará enfocado en personas consideradas con factores de riesgo: mayores de 40 años que presentan patologías tales como cardíacas, hipertensión arterial, obesidad, tabaquismo o sedentarismo. En la norma, aprobada en la sesión ordinaria de la Cámara de Representantes, se unificaron sendas iniciativas presentadas por el diputado Martín Cesino y por el ex legislador Gustavo González.
Los objetivos del programa son minimizar la incidencia, mortalidad y secuelas de enfermedades cerebrovasculares; desarrollar políticas públicas de prevención, control periódico y seguimiento para la población con factores de riesgo; e implementar protocolos de evaluación para la detección y el diagnóstico temprano de estas patologías.
Asimismo, garantizar cobertura y provisión de medicamentos autorizados para tratamiento, rehabilitación y seguimiento de pacientes; promover la investigación científica, clínica y preventiva, y el desarrollo de tecnología aplicada.
Además, impulsar la formación y capacitación de los profesionales de salud; y brindar información y contención a los familiares y cuidadores de las personas afectadas.
El programa está integrado por el nivel central del Ministerio de Salud Pública; zonas sanitarias y jefaturas de áreas programáticas; y hospitales categorizados como Nivel I, II y III de complejidad.
Los establecimientos asistenciales tendrán unidades “stroke”, que son áreas dedicadas al diagnóstico precoz y al tratamiento especializado de pacientes con este tipo de enfermedades durante su fase aguda.
También se instituyó el 29 de octubre de cada año como Día Provincial de la Prevención y Concientización sobre Enfermedades Cerebrovasculares y se creó el Registro de Pacientes con Enfermedades Cerebrovasculares, para obtener datos estadísticos que permitan la planificación efectiva de los servicios de salud.
En los fundamentos del proyecto, Cesino afirmó que “las enfermedades cerebrovasculares constituyen un problema de salud pública a nivel mundial, y son consideradas como una de las principales causas de discapacidad y muerte”.
Explicó que “el reconocimiento temprano de los signos y síntomas puede ayudar a reducir considerablemente las secuelas de las enfermedades cerebrovasculares”, y que los síntomas más comunes son “debilidad o alteración de la sensibilidad en la mitad del cuerpo o solo de la mitad de la cara, un brazo o una pierna; alteraciones de la vista, no ver con uno o ambos ojos, ver la mitad de las cosas o solo parte de ellas, ver doble; problemas para hablar o entender, confusión; dolor de cabeza; sentir que todo gira, vértigo, pérdida del equilibrio; dificultad para leer o escribir”.
“Muchas veces el paciente no es consciente de que está sufriendo una enfermedad cerebrovascular, por eso el rol de la familia y del entorno es fundamental para la búsqueda de atención médica inmediata”, advirtió.
Destacó que el Gobierno de la provincia desde hace algunos años realiza “un esfuerzo sostenido por capacitar el recurso humano y mejorar el nivel tecnológico en todas las especialidades concernientes al área de la salud”.
“Este Programa promueve la investigación científica, clínica y preventiva, el desarrollo de tecnología aplicada, e impulsa la formación y capacitación de los profesionales de salud, que se traducen en mejor servicio para todos los misioneros y misioneras”, agregó.
En el recinto, la diputada María del Carmen Méndez Asón informó que “ante los síntomas es fundamental actuar con celeridad dado que en cuestión de minutos las neuronas cerebrales empiezan a morir, y el tratamiento inmediato, la acción temprana, puede reducir al mínimo el daño cerebral y la posibilidad de complicaciones. Ante la sospecha de una ECV toda celeridad es poca porque el tiempo es cerebro”.
“El objetivo de esta norma es minimizar su ocurrencia atacando los factores de riesgo, educando y sensibilizando a la población, sobre todo en la adquisición de hábitos más saludables como una alimentación equilibrada y la práctica regular de ejercicio físico”, agregó la legisladora.
El doctor Carlos Barros, jefe de Neurología del Hospital Escuela de Agudos “Dr. Ramón Madariaga”, manifestó que esta norma “contempla por un lado la prevención y el tratamiento de enfermedades crónicas, como la hipertensión, la diabetes, la obesidad, el tabaquismo; y por otra parte, que todos tengan un acceso equitativo a los tratamientos, ya sea el tratamiento en su fase crónica o en el tratamiento en su fase aguda”.
Por su parte, Lisa Maidana, presidenta de la Fundación Nuevo Comenzar, se refirió a la iniciativa y dijo que “es importante porque ayuda a la detección temprana, concientización, diagnóstico, tratamiento y también la prevención de enfermedades cerebrovasculares”.
“El tiempo es oro, el tiempo es vida. Así que agradecemos realmente poder contar con esta herramienta”, agregó Maidana.