Hace ya tiempo que la violencia narco y la inseguridad en Rosario cruzó el límite, con crímenes resonantes que se repiten a diario, balaceras, muertes entre bandas pero también asesinatos de hombres inocentes, de mujeres y hasta de niños. Pero el ataque ayer con 14 balas que atravesaron las persianas del supermercado Unico, propiedad del suegro de Lionel Messi, causó una fuerte conmoción y profundizó la polémica por lo que se hace, y lo que no, desde las máximas autoridades nacionales para controlar la violencia del crimen organizado en Rosario, y en la provincia de Santa Fe.
El ataque se produjo a las 2.53 de la madrugada y las cámaras de seguridad mostraron a dos personas que huyeron en moto a contramano tras ejecutar la acción. La policía recuperó una docena de vainas. No hubo una amenaza previa, dijo el papá de Antonella Rocuzzo.
“El primer objetivo de los que hicieron esto fue que se entere todo el mundo. Buscaron el impacto público. No hay nada que indique que querían intimidar o exigir algo a la familia Roccuzzo. Utilizaron algo próximo a Lionel Messi para asegurarse una gran difusión. Y con eso el mensaje le llegó a todo el mundo”, evaluó el fiscal Federico Rébola, de la Unidad de Balaceras de la Fiscalía Regional de Rosario. Admitió también que no tenían ninguna pista concreta sobre los autores.
A todo esto, la periodista Maite Peñoñori posteó un mensaje de Celia maría Cuccittini, la mamá de Messi: “Estamos bien, fue en el supermercado del papá de Anto. Nunca nos movimos con custodia, llevamos una vida normal”, le expresó.
Los tiradores dejaron un mensaje escrito a mano que se está peritando, con la amenaza al capitán argentino y al intendente Pablo Javkin: “Messi te estamos esperando. Javkin es narco, no te va a cuidar”.
El alcalde rosarino, que viene haciendo fuertes reclamos de mayor asistencia de fuerzas nacionales, protestó enérgicamente. “Hablé con el ministro de Seguridad y el gobernador (el peronista Omar Perotti), yo los quiero acá. ¿A cuánto esta el Presidente de acá? A media hora, ¿No?”, se preguntó Javkin. “A Rosario no hay un carajo de ayuda concreta”, dijo encendido.
Poco después, desde Salta, donde encabezó un acto, Alberto Fernández sostuvo que “estamos haciendo mucho, pero evidentemente algo más habrá que hacer” en Rosario, y contó que se había comunicado con Javkin.
El alcalde pertenece al Frente Progresista y tiene una relación tirante con Perotti, al igual que el gobernador con Fernández, con quien se reunió a solas a mediados de febrero en la Casa Rosada para pedirle más recursos y que se “involucre” con lo que pasa en la provincia. En el intríngulis político, Alberto tiene ahora de jefe de Gabinete a Agustín Rossi, rosarino y rival de Perotti en la interna santafesina.
Aníbal Fernández, cuestionado
Otra polémica quedó abierta por la reacción del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández. “Los narcos ganaron, pero hay que revertir la situación”, dijo. Anoche, pasadas las 21 al término de una reunión de la Junta de Seguridad Provincial, el gobernador Perotti manifestó el «repudio total y unánime» de todos los participantes a las expresiones de Aníbal F. y reclamó al Gobierno central «mayor presencia federal, de efectivos y de logística y recursos».
En diciembre, Aníbal F. había tenido un fuerte cruce con la provincia cuando en visita a Rosario sostuvo que “hace 20 años que empezaron a crecer los crímenes. No quieran achacárselo al Gobierno, Santa Fe tendría que haberlo resuelto sin las fuerzas federales”.
Mauricio Macri fue uno de los dirigentes opositores que se pronunció. Desde su cuenta de twitter calificó el hecho de “terrible” y afirmó que “no se puede convivir con el narco. Hay que combatirlo con decisión. A fin de año esto empieza a cambiar. Todo mi apoyo a Leo, Antonela y sus familias”, expresó. Esto sucede luego de que periodistas militantes kirchneristas salieron a criticar duramente a Messi y a Emiliano Dibu Martínez por la foto que se sacaron con sus parejas y Macri, titular de la Fundación FIFA, tras la entrega de los premios The Best el lunes pasado, en París.
En el Congreso, desde Juntos por el Cambio y también los socialistas santafesinos -que gobernaron la provincia por 12 años- cuestionaron a Aníbal F. y responsabilizaron a Cristina Kirchner por frenar en el Senado la comisión bicameral de reforma del Código Procesal Penal, impidiendo avanzar en mecanismos judiciales para atacar el narco.
El atentado contra el super de la familia política de Messi tuvo amplia repercusión en la prensa del mundo. Y resignificó lo sucedido esta semana en el Congreso, donde Alberto Fernández ante la Asamblea Legislativa el miércoles buscó insólitamente cargarle a la Corte Suprema la responsabilidad por la falta de nombramiento de jueces federales en Santa Fe.
Pero ya en la sesión de Diputados del martes por la reforma previsional, el santafesino Juan Martín (UCR) advirtió en tono dramático por la “escalada de violencia”, pidió la interpelación Aníbal F. y exhibió cuadros que muestran que Santa Fe esta 14ava en el ranking de ejecución del presupuesto de seguridad Interior: $6.599 millones en 2022, por abajo de provincias mucho más pequeñas y sin problemas graves con el narco. “El Gobierno deja al desamparo la provincia”, denunció Martín.
Desde el propio oficialismo, el diputado Roberto Mirabella, mano derecha de Perotti y uno de los que busca sucederlo, reclamó también “que el Gobierno Nacional tome una participación más activa. El ministro de Seguridad hoy debería estar viviendo en Rosario para conducir y liderar las fuerzas que combaten el narcotráfico”, dijo Mirabella y alertó que “somos la provincia que recibe el menor presupuesto en seguridad por habitante de parte del Ministerio de Seguridad de la Nación”.