Algunas fábricas decidieron suspender las ventas ante la confusión en el mercado. También afectará a los modelos de producción nacional
Los anuncios del ministro Sergio Massa de encarecimiento de las importaciones ya tienen impacto en muchos sectores, entre ellos el automotor
Ayer se vivió una jornada de mucha confusión en fabricantes, concesionarias y distribuidores de marcas importadas ya que a todos, en mayor o menor medida, los afecta. Las primeras horas de la mañana se dedicaron a analizar el alcance de la medida y a definir la política comercial.
Ante este panorama, el mercado reaccionó con cautela. Terminales como Volkswagen y Stellantis decidieron suspender las operaciones hasta definir los pasos a seguir.
En concesionarias de otras marcas ya recibieron el aviso informal que los precios se ajustarían 7,5%. Probablemente hoy o mañana se reciban las nuevas listas de precios.
El problema es que los anuncios se conocieron en los últimos días del mes y las empresas están presionadas por cumplir los objetivos de venta. Por llegar a esas metas, las concesionarias reciben un premio por parte de la terminal.
Por eso, también está en debate qué harán los fabricantes: si rebajan los objetivos y aumentan los precios o mantienen el volumen de operaciones previsto sacrificando rentabilidad. Lo claro es que agostó será un mes con autos más caros que julio porque al incremento que vienen sufriendo los 0 km todos los meses se sumará el mayo costo de importación.