Luego de 48 horas de incertidumbre y ante el enorme rechazo de la sociedad, las autoridades de Parques Nacionales devolvieron hoy al mediodía la cámara de fotos y las memorias al fotógrafo Sixto Fariña.
Más allá del alivio por recuperar sus equipo de trabajo, grande fue la sorpresa al revisar sus memorias y encontrar que había sido borrado todo el material, algo totalmente ilegal y que ningún funcionario de Parques Nacionales tiene la autoridad para hacerlo.
“Hace unos 40 minutos me llamaron de Parque Nacionales y me devolvieron la cámara me hicieron un acta de infracción, que firme en disconformidad. Cuando me dieron mi cámara y las memorias me encontré con que borraron todo mi material, la verdad es que llevo 46 años de trabajo y nunca me pasó esto”, confesó entre lágrimas Fariña, luego de recuperar su equipo de trabajo.
“Desde que me sacaron la cámara el viernes a las 13 horas, me sentí impotente porque no podía entender la situación que me saquen la cámara y me borren la memoria en mi propia provincia, ni la policía hizo eso nunca. Yo me quedé 10 horas ahí, pero nadie me dio una respuesta. Por suerte mucha gente me llamó para darme su apoyo y se movilizaron para ver que se podía hacer. Agradezco a todos el diario El Territorio, tanto directivos como compañeros de trabajo que se movilizaron y a todos los que se movilizaron porque me sirvió para tener esperanza mientras me devolvían mis equipos”, resaltó agradecido.
El reportero gráfico Sixto Fariña sufrió las autoritarias y violentas acciones de la administración del Parque por estar de paseo con su familia y decidir sacar unas fotos con su equipo profesional. Los guardaparques lo abordaron, lo quisieron obligar a borrar las fotos que tomó en su visita y hasta le secuestraron la cámara fotográfica, su herramienta de trabajo, en la que además de fotos privadas tenía material tomado para El Territorio.
“En este tiempo mucha gente de Iguazú se acercó a contarme como es el manejo de Parques y lo que pasa adentro como se mueven en forma autoritaria. Ahora me voy a juntar con mi abogado y vamos a analizar los pasos a seguir y creo que vamos a hacer todas las presentaciones legales y ante los organismos de prensa de la provincia y el país para que nadie más tenga que pasar por lo que yo pasé”, resaltó Fariña.
Desde hace al menos dos años, cuando por una decisión inentendible, la administración del Parque Nacional Iguazú restringió el acceso al punto de mejor vista y sólo se puede acceder a él pagándoles a los fotógrafos autorizados el valor de una fotografía. Una decisión que con el cambio de gobierno nacional no se modificó. Así, la administración del parque, hoy a cargo de Sergio Acosta, monopolizó la mejor vista de la Garganta del Diablo, en beneficio de unos pocos.
Fuente: El Territorio