El Gobierno anunciará que la Argentina hará pruebas de otra vacuna contra el coronavirus, desarrollada en China.Se trata de un antídoto conocido como «Beijing», que se sumará a los convenios con otros dos productos para prevenir el COVID-19 en el país: el de la Universidad de Oxford y el de Pfizer.
El acuerdo con China garantizará el abastecimiento futuro de esta vacuna, si resulta exitosa. En el caso del producto de Oxford, que se fabricará en la Argentina, el suministro será de once millones de dosis.
La vacuna asiática fue desarrollada por la empresa estatal china SinoPharm y es «inactiva». Se fabrica cultivando el virus completo en un laboratorio y después matándolo, mismo método usado para hacer antídotos contra la polio.
Es el tercer acuerdo que la Argentina realiza por vacunas contra el COVID-19, que se suma a los casos de Oxford y de Pfizer. Los antídotos de esta empresa se prueban actualmente en el Hospital Militar Central, donde se aplica a voluntarios que participan de la última etapa de experimentación.
La vacuna de Oxford
La semana pasada el presidente Alberto Fernández y el ministro de Salud González García anunciaron en conferencia de prensa que la Argentina empezará a fabricar la vacuna contra el coronavirus desarrollada por científicos de la Universidad de Oxford.
Se realizará en conjunto con el laboratorio AstraZeneca y la intención es que la producción, a cargo del país y México, suministre las vacunas a Latinoamérica a partir del primer semestre de 2021. En total serán entre 150 y 250 millones de dosis que costarán entre tres y cuatro dólares cada una.