Las autoridades de la provincia de Corrientes informaron que un total de 220 familias de diversas localidades ubicadas sobre las riberas de los ríos Paraná y Uruguay permanecen evacuadas debido a los repuntes experimentados por ambos caudales, mientras que la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) activó un dispositivo de asistencia junto al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
Un total de 220 familias, principalmente del este provincial, permanecen evacuadas en Corrientes debido a las crecientes de los ríos Paraná y Uruguay, por lo que las autoridades provinciales, así como Yacyretá, Desarrollo Social de la Nación y los municipios llevan adelante mecanismos de contención.
Por el incremento en el caudal del Paraná fueron evacuadas 17 familias de San Antonio, conocida como la isla Apipé Grande, y 22 de Apipé Chico.
Mientras que por la crecida del río Uruguay permanecen evacuadas 181 familias de las localidades de Santo Tomé, Alvear, La Cruz, Yapeyú, Paso de los Libres y Monte Caseros, especificaron desde el Comando de Operaciones en Emergencias (COE) de la provincia.
Sobre el Paraná, la EBY, Desarrollo Social y el municipio de San Antonio realizaron en las últimas horas la entrega de módulos alimenticios para más de un centenar de familias afectadas por las adversas condiciones climáticas, informó la compañía hidroeléctrica.
«Las acciones se llevaron a cabo en las localidades de Puerto Mora y Paraje Monte Grande de la isla Apipé Grande», especificaron.
«Vale aclarar que el Río Paraná, en Brasil, está en creciente. Y existe la posibilidad de que la represa de Itaipú abra sus compuertas en estos días», adelantó el funcionario.
«Esto -agregó- afecta al sector productivo de la zona: los ladrilleros no tienen cómo trabajar y las chacras quedaron bajo agua; mientras tanto se está moviendo al ganado para minimizar las pérdidas».