El volumen de carne exportada será de alrededor de 900.000 toneladas, similar a los números del 2022, pero el ingreso de divisas será de US$ 2.800 millones, un 30% menos que el mismo período. Así lo vaticinó Daniel Urcía, presidente de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas y vicepresidente del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA).
«Venimos de un buen volumen tanto de exportaciones como del mercado doméstico. Sin embargo, ese mayor volumen no viene con rentabilidad. A nivel internacional, hay precios deprimidos, y en mercado interno, si bien creció el consumo, la situación macroeconómica, con pérdidas de poder adquisitivo, hace que los precios estén planchados», remarcó el directivo sobre la situación de la industria.
«El ganadero se está descapitalizando. Hay un retraso fuerte en los precios de la hacienda y de los cortes si se mide con la inflación ene general», agregó sobre la coyuntura del productor. Cabe recordar que solamente el valor de la carne en el mercado local subió 1,5% en junio y 71% interanual, contra 6%y 115%, respectivamente, de la inflación general.
Esta caída de ingresos en las exportaciones de carne se debe principalmente a la baja en los valores internacionales de la carne, sobre todo los cortes que se exporta a China, que representa el 70% del total de los embarques argentinos.
«China ha tenido momentos de muy buen pago y hoy estamos en los pisos históricos, con un 50% por debajo. Tuvo una particularidad que se reemplazó la vaca de manufactura que iba mayoritariamente a Rusia a China», advirtió.
Según publicó consultor Ignacio Iriarte en su columna semanal en AgroVoz, la vaca en 5 cortes, mercadería muy representativa del comercio con el gigante asiático, valía U$S 6.200 en marzo del 2022, para caer en julio a U$S 5.300 y a U$S 4.000 en diciembre. En los últimos días la vaca en 5 cortes se negocia a unos U$S 3.800, un 38% por debajo de quince meses atrás.
Continuando con el especialista, desde mediados del 2022, «los importadores chinos han venido comprando grandes volúmenes de carne pagando precios mucho más altos que los actuales y hoy pretenden compensar las pérdidas resultantes bajando el valor que pagan por los cortes»
«El stock acumulado de carne en cámara es muy alto –estaría en el orden de las 600 mil a un millón de toneladas–, por lo que tendrían que pasar varios meses para que este consumo alicaído –especialmente en el canal de foodservice– absorba el enorme stock de carne acumulado en poder de importadores, distribuidores y procesadores», agregó Iriarte.
Al respecto, Urcía alertó que la caída de los valores en el mercado internacional impactan aún más en Argentina que en los países vecinos.
«La situación interna no es comparable con la de Brasil y Uruguay porque hay diferentes tipos de cambios y restricciones de cortes. que genera un impacto diferente en relación a los competidores», sostuvo Urcía, durante el anuncio del “Gran Campeón” del Concurso Pasión por la Carne Vacuna Argentina.